Mi querido amigo/amiga .
Cuando pienso en el talento y el contratalento cualquiera diría que, aunque parecen opuestos, muchas veces se pueden entrelazar en nuestra experiencia diaria.
T alento es aquello en lo que de forma natural destacamos o algo que nos apasiona hacer y en lo que somos buenos . Esta habilidad o capacidad que se manifiesta de manera fluida, nos llena de satisfacción, y solemos invertir tiempo porque disfrutamos al hacerlo . ¿Es así? en mi caso, un talento podría ser actuar o la creatividad que despliego en el proceso de creación teatral.
Por otro lado, el contratalento podría entenderse como aquellos aspectos que pueden aparecer para oponerse a nuestro talento, los desafíos o limitaciones que enfrentamos al intentar desarrollar o expresar ese talento . Aunque no lo veo como algo negativo, sino más bien como una parte natural de nuestro proceso que nos puede ayudar a crecer y a superarnos.
Volviendo al ejemplo de antes, el contratalento podría ser la dificultad que siento al exponerte ante el público, ese miedo escénico o inseguridad que aparece en el momento de mostrar mi talento.
Se podría decir que esta destreza en la que brillamos de forma natural, a veces va acompañada de una sombra , como los retos o bloqueos que necesitamos superar para poder expresarnos plenamente. Ambos son importantes, ya que enfrentarse a los contratalentos a menudo nos ayuda a perfeccionar y profundizar en nosotros, llevándonos a un nivel superior.