Mi querido amigo/amiga .
La honestidad parece simple, pero cuando pienso en ella siento que tiene muchas capas que podemos explorar y desarrollar a lo largo de nuestra vida . Cuando pensamos que somos honestos puede ser un buen comienzo, pero creo que cuando queremos alcanzar una honestidad más profunda requiere un trabajo interno constante que puede resultar motivador.
Comenzar por conocernos mejor, aceptando tanto nuestras luces como nuestras sombras. Nuestros desequilibrios son aspectos de nosotros mismos que preferimos ignorar, como miedos, inseguridades y deseos ocultos . Enfrentarnos a ellos nos permite estar más en armonía. No es fácil, pero es liberador.
La auto-reflexión puede ser una buena propuesta. Preguntas como "¿Quién soy realmente?" y "¿Qué motiva mis acciones?" nos puede ayudar a comprender mejor y a reconocer nuestras contradicciones. Al hacerlo, quizá nos volvamos más conscientes de nuestras verdades internas, lo que nos permite ser más honestos en nuestra comunicación y comportamiento, es como si nos animásemos a ser mas coherentes con lo que pensamos, decimos o hacemos .
A medida que nos conocemos mejor y trabajamos en nuestras sombras, vemos la honestidad no como un acto puntual, sino como una forma de ser . Esto es un gran cambio, ya que significa vivir de acuerdo con nuestros valores y principios de manera constante pero sencilla, sin necesidad de máscaras o pretensiones. De esta manera se puede convertir en una práctica diaria, donde cada acción y palabra reflejan nuestra verdadera esencia.
Cuando reconocemos que podemos equivocarnos y ser conscientes de ello es liberador y también nos brinda la oportunidad de rectificar, lo que también forma parte de nuestra humanidad.
